Me enseñaron que para aprender primero hay que equivocarse. Que hay que vivir cada día como si fuese el último. Que siempre hay que poner buena cara al mal tiempo. Que mientras más subas más fuerte será la caída.  Que las cosas solo acaban cuando nosotros queremos. Que hay sonrisas con magia y miradas que hablan. Que a veces merece la pena perder. Que amigos de verdad muy pocos. Que hay que querer y amar, pero nunca odiar. Que el primer amor siempre te marcará. Que tienes que ser quien eres y luchar por lo que quieres. Que las apariencias engañan. Que los sueños están para que los cumplamos. Que las palabras se las lleva el viento y lo que cuentan son los hechos. Que lo urgente no es lo más importante. Que hay que saber elegir nuestras prioridades. Que nadie mejor que uno mismo sabe lo que le conviene. Que la vida está hecha de pequeños instantes.